La mejora de Fitch es la primera que recibe de una agencia de calificación desde 2010, año en que Fitch le arrebató la nota de triple A, que le había concedido en 2003.
Sin embargo, la agencia mantiene la calificación de su deuda en "BBB", sólo dos pasos por encima del estado de "bonos basura".
"España ha avanzado mucho desde 2012-2013", escribió la agencia. "Las autoridades han llevado a cabo reformas importantes en el mercado laboral, sistema de pensiones, en el marco impositivo y en el sector financiero", agregó.
"El ritmo de las reformas probablemente se ralentizará en 2014-15 a medida que las presiones externas se alivien y se vislumbren las elecciones de 2015, aunque los esfuerzos realizados hasta la fecha deberían colocar a la economía sobre una base más segura", indicó la agencia.
Fitch también valoró positivamente que España haya reestructurado su sector bancario y salido de la recesión. Al mismo tiempo, subrayó la mejoría en las condiciones de financiación de España, lo que ha permitido al país un sustancial ahorro en el pago de intereses e incluso haber conseguido completar con éxito una emisión de un bono con vencimiento a 30 años.