Según Alejandro Murat, gobernador de la región, continúan muy tensas las labores de restauración, al existir un alto grado de destrucción de inmuebles y no contar con los recursos indispensables, aunque deben llegar -dijo.
Precisó que tienen el control del 90 por ciento de las destrucciones: unas 31 mil viviendas, 674 escuelas, de ellas unas 150 en una situación precaria. Aun cuando vecinos de comunidades aisladas exigen más ayuda del estado, Murat estima que se cuenta con suficientes alimentos y abastecimientos, especialmente aquellos de primera necesidad.
También se distribuyen colchones y mantas para quienes perdieron sus hogares y pernotan a la intemperie por miedo a ser sorprendidos por otro gran movimiento telúrico, pues la tierra no deja temblar.
Aclaró que toda la ayuda será trasladada desde Ciudad México y distribuida por miembros del Ejército y la Marina.
Explicó que de forma progresiva las brigadas de salud llegan a todas las zonas para los primeros auxilios y mantener un control estricto sanitario y así evitar brotes de enfermedades.
Se cuenta, aseveró, con 33 unidades móviles médicas, tres vagones habilitados como hospitales en los municipios de Salina Cruz, Matías Romero y Santo Domingo Tehuantepec.