Cherksi explicó que Abdelali presentó su renuncia al primer ministro interino, Abderrahim El Kib, sin precisar si había sido aceptada.
Con ello, Abdelali respondió a las críticas del CGN, máxima instancia política desde las elecciones de julio pasado, sobre la actuación de las fuerzas de seguridad en general y de los miembros de la Alta Comisión de Seguridad, formada por exrebeldes, en particular.
Durante una sesión hoy del CGN en la que el Primer Ministro expuso la situación de la seguridad en el país tras los últimos atentados, varios de los diputados acusaron a la Alta Comisión de inmovilismo y pasividad.
El pasado 19 de agosto la capital libia fue sacudida por un doble atentado con coche bomba que causó dos muertos y cuatro heridos.
Abdelali anunció dos días más tarde la detención de los autores del atentado, lo que sin embargo no parece haber calmado los ánimos.
Islamistas radicales destruyeron ayer sábado el segundo mausoleo musulmán más importante de Tripoli, ante las miradas atónitas de los habitantes.
Según varios testigos consultados por Efe, miembros de la Alta Comisión de Seguridad, que forma el núcleo de las fuerzas de seguridad libias, presenciaron el ataque pero se limitaron a cortar el tráfico y no intervinieron para detener a los responsables.
También en Bengasi, segunda ciudad libia y bastión de la rebelión que derrocó al régimen del coronel Muamar al Gadafi, la seguridad se ha degradado en las últimas semanas, sobre todo tras el asesinato de un general a principios de agosto y del atentado contra el vice cónsul de Egipto la semana pasada.