El diplomático explicó que el documento define áreas para la cooperación en el rubro de cambio climático, en la transición hacia un desarrollo ambientalmente sostenible bajo en carbono, la conservación de la biodiversidad y la protección del medio ambiente y los recursos naturales.
Sostuvo que existen varias razones que hacen de México un “socio importante” en la materia, como “el gran liderazgo que el presidente Felipe Calderón ha demostrado en el tema. Esto ha sido imprescindible”.
El Memorándum de Entendimiento para la Cooperación México-Estados Unidos en Materia de Desarrollo Bajo en Emisiones, Cambio Climático y Bosques fue suscrito ante el mandatario mexicano en la residencia oficial de Los Pinos.
Los firmantes fueron el secretario del Medio Ambiente, Juan Rafael Elvira Quesada, y el director en México de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Thomas Delaney.
Wayne reconoció que México ha avanzado en diversos campos para aminorar los efectos del cambio climático, como reducir la tasa de deforestación, fomentar la adopción de energías renovables e introducir políticas y mecanismos para adaptar tecnologías y equipos más eficientes.
“En otras palabras, México ha ido del dicho al hecho”, enfatizó tras explicar que como primer paso en la aplicación del memorándum se anunció el lanzamiento de dos programas para reducir emisiones de gases de efecto invernadero en los sectores forestal y de energía.
Informó que esos mecanismos durarán cinco años, con una inversión total esperada de 70 millones de dólares, y subrayó que el gobierno de Estados Unidos está muy complacido de contribuir a los grandes esfuerzos del gobierno de Calderón Hinojosa en la materia.
En su oportunidad Elvira Quesada indicó que ese instrumento propicia la continuidad de los esfuerzos nacionales para combatir los efectos del cambio climático.
El titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) señaló que esa labor incluye el fomento a las energías renovables, así como la recuperación y conservación de bosques y selvas, “que son los grandes aliados en la reducción de emisiones contaminantes”.
Entre los esfuerzos nacionales que se verán fortalecidos mencionó el el programa ProÁrbol, mediante el cual comunidades reciben apoyos por conservar y manejar de manera sustentable más de 4.6 millones de hectáreas forestales en el país, equivalentes a la superficie de los estados de México, Hidalgo y Tlaxcala.
El funcionario federal citó que otra estrategia es el desarrollo y la puesta en práctica de fuentes de energía renovable, entre las que destaca la eólica.
Elvira Quesada hizo ver que sólo con la suma de acciones decididas y ambiciosas se mantendrá el incremento de la temperatura mundial por debajo de los dos grados centígrados, acordados por la comunidad internacional en la cumbre de Cancún sobre cambio climático.