El secretario de Hacienda Luis Videgaray, y el jefe de la agencia tributaria, Aristóteles Núñez, informaron que la red involucraba a 53 empresas proveedoras de China, Hong Kong, Singapur, Panamá, Islas Vírgenes, Corea del Sur y Estados Unidos, 31 importadores mexicanos y 113 empresas de fachada, así como a una veintena de agentes aduanales mexicanos.
Se estima que la red evadió impuestos por unos 500 millones de pesos (37 millones de dólares). Las empresas utilizaban facturas falsas para ingresar a México mercancía subvaluada, es decir con un valor real que era mayor al que declaraban.
"La diferencia en el valor de venta y el costo era pagada por el importador a empresas ficticias, quienes sin tener una relación real de negocio transferían grandes cantidades de dinero a los proveedores", informó la Secretaría de Hacienda.
Las investigaciones se realizaron durante un año entre julio de 2013 y junio pasado.
Como parte del operativo se confiscaron cuentas de 85 empresas y se presentó una denuncia contra 154 compañías y personas ante la Procuraduría General de México (PGR) por operaciones con recursos de procedencia ilícita. (DPA)