"Todas las partes en este conflicto han mostrado desprecio por la vida de civiles y violan de manera flagrante sus obligaciones internacionales", afirmó en Londres el secretario general de AI, Salil Shetty. Además, la organización tiene pruebas de que Rusia está atizando el conflicto tanto mediante el apoyo a los separatistas en el este de Ucrania como a través de una intervención directa.
Según AI, sus colaboradores han reunido en el este de Ucrania en entrevistas con testigos pruebas de ataques arbitrarios, secuestros, torturas y asesinatos. Los testigos habían huido de los combates cerca de las ciudades de Donetsk, Kramatorsk, Lugansk y otras localidades.
Los civiles afirmaron que el Ejército ucraniano había realizado intensos ataques a sus lugares de residencia. Esos ataques eran claramente arbitrarios y podrían suponer crímenes de guerra, según Amnistía Internacional.
Los testigos también dijeron que vecinos suyos habían sido secuestrados, torturados y asesinados por combatientes separatistas.
Algunos habitantes de Slaviansk relataron que los separatistas habían secuestrado a un pastor, a dos de sus hijos y a dos feligreses reclamando un rescate de 50,000 dólares (casi 40,000 euros). Cuando la parroquia había reunido el dinero para pagar el rescate, los secuestradores ya habían matado a todos los rehenes.
Según otros reportes, calificados de creíbles por AI, grupos de combatientes voluntarios allegados al Ejército ucraniano han secuestrado y golpeado a varias personas.
"Los civiles en Ucrania merecen protección y justicia", dijo Shetty. "Sin una investigación esmerada e independiente existe el riesgo de que varias generaciones de ucranianos sufran las cicatrices de esta guerra".
AI aseguró también que existen imágenes satelitales que demuestran que Rusia interviene directamente en el conflicto. Las imágenes muestran el emplazamiento de piezas de artillería apuntadas al oeste dentro de las fronteras ucranianas los días 13 y 29 de agosto.
Las imágenes satelitales, aunadas a reportes sobre la presencia de tropas rusas en territorio ucraniano, demuestran sin duda alguna que se trata de un conflicto armado internacional, subrayó el secretario general de AI. El Kremlin ha negado varias veces la participación de Rusia en los combates en Ucrania.