De obtener la suspensión de la sentencia, el gobierno argentino espera avanzar en una negociación con los inversionistas que no ingresaron en los canjes de 2005 y 2010, y que para cobrar acudieron a los tribunales estadounidenses.
Argentina solicitó el lunes al juez de Nueva York Thomas Griesa una "medida suspensiva" de la sentencia que la obliga a abonar a los fondos NML Capital y Aurelius, a los que considera "fondos buitre".
El ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, aseguró que "la Argentina va a honrar su deuda" en torno a la disputa legal con los fondos especulativos de inversión.
"Hemos tenido un fallo de la Justicia (de Estados Unidos) sobre los famosos fondos buitre y no tengan la menor duda de que lo vamos a resolver, la Argentina va a honrar su deuda, como lo hizo con cada una de las deudas, tenemos una historia en ese sentido", aseguró el funcionario en declaraciones a radio América.
Tras el pedido de la Argentina de suspender la sentencia, Griesa nombró al abogado Daniel Pollack para mediar y llevar adelante las negociaciones con los bonistas que no entraron en los canjes.
"Esta designación de un facilitador es una señal importante de que hay grandes posibilidades de llegar a un acuerdo", dijo hoy el economista Dante Sica, de la consultora Abeceb, ante corresponsales extranjeros.
El especialista sostuvo que "estos días van a ser cruciales si el juez encuentra que hay buena voluntad de la Argentina para avanzar en la negociación".
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo hoy que no se iba a referir a la "estrategia judicial" a seguir con los "fondos buitre" hasta que no haya una respuesta del juez de Nueva York respecto al pedido de suspender el fallo.
"Dada la complejidad de esta cuestión y todas las aristas legales, no voy a formular comentarios respecto a la estrategia judicial. Es por respeto a la estrategia judicial misma", dijo el funcionario en conferencia de prensa en la Casa de Gobierno.
El gobierno sostuvo que necesita ese "paraguas legal" para poder negociar con los "fondos buitre" y, a la vez, pagar en Nueva York 900 millones de dólares por vencimientos de la deuda reestructurada sin riesgo de que esos fondos sean embargados.
Para Sica ya "se redujo mucho la posibilidad de que se caiga en default". Además, sostuvo que el gobierno "tomó el único camino posible: acatar el fallo y pagar".
"Lo que hasta ahora se llama negociación -continuó el economista-, es pedirle al juez que dentro del marco del paraguas legal, acordar monto y forma de pago. La sentencia ya dictamina el monto máximo a pagar", en 1,330 millones de dólares.
"Así despejaría el último conflicto que le queda para acceder al mercado internacional", señaló Sica.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, había dicho el lunes que "es esencial que el juez otorgue" la medida solicitada para que la Argentina pueda continuar pagando "normalmente" el 92,4 por ciento de su deuda reestructurada.
Por su parte, el ex presidente del Banco Central Aldo Pignanelli sostuvo que es un "hecho solucionado" la disputa entre el gobierno y los "fondos buitre", al punto de señalar que hay "un principio de acuerdo y un borrador", en declaraciones a Radio del Plata. (DPA)