Según cifras de la compañía Aon, los daños de bienes asegurados ascienden a entre 200 y 300 millones de euros.
Este lunes los vientos alcanzaron los 173 kilómetros por hora, tiraron árboles, provocaron la interrupción del tráfico ferroviario y demoras en numerosos vuelos en el norte del país.
Ocho personas murieron desde el fin de semana. Las conexiones ferroviarias seguían viéndose afectadas hoy en tramos como Hamburgo-Kiel y algunas escuelas debieron permanecer cerradas.