El informe, titulado "El año más frío del resto de sus vidas", señala que 538 millones de niños están expuestos actualmente a olas de calor largas (de 4.7 días como mínimo cada vez); y esta cifra puede escalar en 2050 a los 1,600 millones de niños en caso de un calentamiento de 1.7 grados, mientras que llegará a los 1,900 millones en caso de calentamiento extremo (2.4 grados).
Los efectos dramáticos que recoge el informe se van a sentir principalmente en Europa, mientras que África y Asia son señaladas como las regiones donde la mitad de los niños van a estar expuestos con gran frecuencia a temperaturas extremadamente altas, es decir, con al menos 83 días al año con termómetros por encima de los 35 grados.
Varios países aparecen mencionados como los más expuestos a las olas de calor en el futuro inmediato, ya sea en su intensidad o en su duración en el tiempo, y entre ellos aparecen principalmente los del Sahel (Burkina Faso, Chad, Mali, Níger y Sudán), del subcontinente indio (India y Pakistán) o Arabia Saudí e Irak, pero ninguno es latinoamericano.
El informe recoge mapas del mundo coloreados según la severidad o duración de los efectos de las olas de calor, y Latinoamérica aparece mejor parada que los demás continentes; dentro de Sudamérica, hay dos regiones más vulnerables al calor: el interior de Brasil y casi toda Venezuela.
En cualquier caso, las recomendaciones del informe son las mismas para todo el mundo en lo referente a la protección de la infancia: mejorar la concienciación de la infancia a nivel educativo, garantizar el acceso al agua y una buena higiene infantil y priorizar a las edades más bajas cuando se habla de financiación climática.