Señaló que la detención o captura de capos y lugartenientes de las bandas delictivas es una buena noticia, pero también debe evaluarse qué está pasando con el sistema de justicia en el país, porque no todos reciben una condena.
"Los datos de la detención de más de 200 mil personas vinculadas con el crimen organizado en los últimos años, se estrella frontalmente contra el dato muy preocupante de que no más de 4 por ciento de ellos han sido sentenciados", destacó.
En su opinión, señaló que la Procuraduría General de la República (PGR) está siendo incapaz de probar las acusaciones, o en el Poder Judicial hay una grave falla a la hora de juzgar a los detenidos.
Ante eso, agregó Carlos Navarrete, "el Poder Judicial está obligado a dar una explicación pública de cuál es la razón de fondo por la que las sentencias son ínfimas, comparadas con el numero de detenidos".