En este caso, el delito de abuso sexual de una mujer y las lesiones ocasionadas a sus dos acompañantes se hace evidente con los testimonios directos de personas que estuvieron presentes y dieron persecución a los presuntos responsables para entregarlos a las autoridades.
Cuando una mujer sufre hostigamiento o tocamientos, inmediatamente debe reaccionar y la ciudadanía está obligada a denunciar y apoyar a la víctima. De verificarse la participación de los ex diputados, habrían incurrido también en una grave incoherencia, ya que en el año 2010 aprobaron la Ley de acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia del Distrito Federal, misma que promueve ordenamientos jurídicos para que las mujeres y niñas tengamos derecho a vivir libres de cualquier tipo de violencia.
Ante este escenario, y refrendando mi preocupación por los derechos de las mujeres, repruebo todo acto que nos violente, asimismo invito a nuestros representantes diplomáticos a actuar conforme a derecho y evitar todo posible encubrimiento.
Como legisladores nos encontramos sumamente indignados, pues a nivel internacional provoca vergüenza que nuestros funcionarios públicos sean señalados por acciones de este tipo, siendo quienes ocupamos cargos públicos los primeros y las primeras en estar obligados a conducirnos éticamente, respetando ante todo la ley.
Hacemos un llamado a las autoridades correspondientes, que de ser acreditada su responsabilidad, inicien el proceso hacia la destitución de manera inmediata de sus cargos a los implicados, así como a investigar los recursos que usaron para viajar a Brasil, ya que de ser del erario público, deberán de ser sancionados.