A través de su cuenta de Twitter, el ministro mexicano anunció que en las últimas horas "se avanzó mucho en el trabajo de limpieza y remoción de escombros en la plancha del pozo 3" de la zona, y en el "reforzamiento de su estructura".
La mina ha sido escenario de una nueva tragedia minera en México al haber quedado atrapados catorce trabajadores en un tiro de carbón en el municipio de Sabinas, en Cohauila, que operaba en condiciones precarias, de los cuáles hasta el momento sólo se han recuperado los cadáveres de siete de ellos.
Desde el martes pasado equipos de rescate privados apoyados por funcionarios y especialistas se encuentran en la zona para tratar de dar con los mineros atrapados, que hasta el momento no han dado señales de vida.
Lozano explicó hoy que los trabajos continúan con el apoyo de cinco expertos chilenos en minas y rescates que ayer llegaron a la zona para sumarse a los esfuerzos y asesorar a las autoridades mexicanas.
Dos de los cinco participaron el pasado año en el exitoso rescate de 33 mineros que se realizó en la explotación de San José, en el desierto de Atacama, en octubre del año pasado, cuya fase final conmovió al mundo.
El ministro mexicano explicó que a lo largo de la operación para sacar a los mineros "solo hubo una suspensión de cuatro horas" la madrugada del miércoles, debido a altas concentraciones de gas metano en la zona.
El Gobierno mexicano ha denunciado una "negligencia brutal" propiciada por "empresarios voraces" que operan en la zona sin atender las condiciones mínimas de seguridad, una situación que podría ocurrir en otros de los 150 pozos carboníferos que hay en la región.
La mina se ubica en un terreno de 270 hectáreas cuya concesión tienen a partes iguales el empresario Luis González Garza y la compañía Minera El Sabino, en representación de la firma Beneficios Internacionales del Norte (Binsa), propiedad de Melchor González.
En la boca del pozo decenas de familiares de los desaparecidos siguen expectantes en torno al rescate y con esperanzas de hallar vivos a sus seres queridos, a pesar del pesimismo de las autoridades.
La región donde ocurrió este nuevo accidente es la misma en la que el 19 de febrero de 2006 sucedió el peor accidente minero reciente, en el yacimiento Pasta de Conchos, en el que murieron atrapados 65 trabajadores.