Sindicato descarta cortar luz en la ciudad de México por conflicto con el gobierno

El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) de la estatal Luz y Fuerza del Centro (LyFC) rechazó hoy que pretenda "provocar un gigantesco apagón" en su área de influencia, que incluye a ciudad de México, y aseguró que el gobierno pretende ocupar por la fuerza las instalaciones de esa compañía pública.

El sindicato, en conflicto con el gobierno, que se niega a reconocer la legitimidad de su líder recién reelegido, aseguró en un comunicado que las fuerzas de la Policía Federal (PF) supuestamente "han sido acuarteladas con la finalidad de ocupar las instalaciones de LyFC en la presente semana" para evitar un "apagón".

El SME "no ha interpuesto a la fecha, ningún emplazamiento a huelga, y por tanto, no existe motivo legal para que la PF tome nuestras instalaciones", aseguraron los obreros.

Las empresas públicas Comisión Federal de Electricidad (CFE) y LyFC manejan el monopolio de la energía eléctrica residencial en México.

LyFC brinda energía eléctrica a la capital mexicana y en algunos municipios de los estados centrales de Morelos, Estado de México, Puebla e Hidalgo.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) se niega a aceptar la "toma de nota" del líder electricista Martín Esparza Flores, un trámite que oficializa los nombramientos de líderes sindicales en el país.

La STPS, que tiene la facultad para cotejar las actas de las elecciones en un sindicato, verificar si el procedimiento se apegó a los estatutos y a las leyes laborales, determinó que los documentos que validan el triunfo de Esparza en los comicios presentan "inconsistencias, insuficiencias y deficiencias".

Por esta razón, los sindicalistas que apoyan a Esparza han protagonizado varias marchas y manifestaciones en la capital mexicana en los últimos días, bloqueando avenidas y desquiciando el tráfico.

El gobierno tiene plazo hasta el próximo 5 de octubre para resolver sobre el asunto Esparza, secretario general del SME hasta el 14 de julio pasado.

Según el sindicato el gobierno busca "agredir y atentar" contra la empresa y el sindicato, con el objeto de obligarlos a "negociar lo innegociable", por lo que pidió "respeto a la autonomía sindical".

Adicionalmente, el candidato perdedor a la cabeza del sindicato, Alejandro Muñoz Reséndiz, expulsado en días pasados de esa central obrera, interpuso una demanda ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) por considerar que la victoria de Esparza se logró mediante un proceso plagado de irregularidades.

Esparza se impuso por una diferencia de tan solo 352 votos, y mientras el gobierno tiene registrados a 41 mil 975 electricistas con capacidad de votar, el sindicato envió un listado de 66 mil 388 votantes.

En México es común que los líderes sindicales se perpetúen en sus cargos por décadas y gocen de grandes fortunas.