Los tiempos han cambiado y, como resultado de la democratización de la información por los medios digitales, han obligado a trabajar a los países en una nueva legislación electoral en la que las redes se consolidan como una herramienta de campaña.
"La forma en que los ciudadanos nos relacionamos hoy, primero entre nosotros y después con nuestros gobiernos, ha transformado no solo la comunicación sino también los esquemas tradicionales del ejercicio del mismo poder", indicó la secretaria General del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político (Icadep), Dunia Ludlow.
Al inaugurar el curso "La Era Digital", con una asistencia superior a la esperada, Ludlow subrayó que el mundo ha atestiguado cómo por este periodo "carreras políticas han terminado tempranamente por escándalos digitales", así como por el rol que han jugado las nuevas tecnologías para la caída de gobiernos en Medio Oriente.
Ante ello, aseguró que muchos teóricos consideran que lo que ha sucedido con la era digital se equipara a lo acontecido con la Revolución Industrial.
Por ello, advirtió que no se puede abordar este cambio exclusivamente desde el paradigma de la comunicación, "pues eso sería perder la foto amplia de lo que verdaderamente ocurre".
La era digital también supone una presión adicional al comportamiento ético y responsable "de quienes hacemos vida pública", ya que todo lo que hace un personaje político queda a la luz de la información pública. Si no queremos que se enteren, mejor ni lo hacemos", continuó.
México se encuentra ante el reto de aprender a manejar espacios cada vez más accesibles de información y, por lo mismo, a manejar cada vez más una cultura de tolerancia, toda vez que la era digital ha democratizado espacios virtuales de convivencia y acordado distancias.
En entrevista, Dunia Ludlow destacó la importancia de realizar este curso, el cual es uno de los más de 20 que el Icadep prevé llevar a cabo en 2015 en respuesta a lo señalado por la Ley Electoral.
En ese sentido, recordó que la Ley Electoral establece una partida que todos los partidos políticos tienen que destinar a actividades específicas, que son de editorial, capacitación y divulgación ideológica.