Los legisladores, representantes por el estado de Jalisco, presentaron esta inconformidad ante el pleno de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión en donde demandaron la aprobación de un punto de acuerdo para exigirle al gobernador Aristóteles Sandoval Díaz y el alcalde de Zapopan, Héctor Robles, integren una estrategia corresponsable en ambos niveles de gobierno para garantizar a los ciudadanos su seguridad, respetando en todo momento sus derechos humanos, a través de políticas públicas.
“La semana pasada el alcalde de Zapopan admitió e hizo público el concepto que tiene en materia de seguridad el cual está basado en dar de ‘macanazos’ a quienes detenga a través de operativos antipandillas que puso en marcha hace algunos meses.
Con total desparpajo y como si fuera motivo de orgullo, el alcalde sostuvo que en cada operativo se detienen a decenas de muchachos y, aunque la mayoría son dejados en libertad, a todos los golpean. Ello motivó la intervención de la comisión de Derechos Humanos del estado, de la cual esperamos una determinación en este caso”, dijo Pérez Camarena.
La diputada federal se dijo preocupada porque lo anterior es muestra de la irresponsabilidad en el ejercicio del poder y del abuso del mismo en contra de la población, pues los cuerpos policiacos efectúan detenciones y propinan golpizas a quienes encuadran en su concepto de “sospechoso”, acto totalmente violatorio de la ley.
El diputado Omar Borboa señaló que el alcalde, así como el gobernador de la entidad, están obligados a emprender operativos legales, bien organizados y planeados, a fin de contener los actos delictivos, pero una estrategia eficiente no está basada únicamente en el uso de la fuerza, sino en la inteligencia para ofrecer opciones en los campos social, cultural y económico, entre otros, a la población.
La también secretaria de la Comisión de Derechos de la Niñez, Pérez Camarena, recordó que el gobierno de Jalisco no ha puesto en marcha una estrategia eficiente para combatir el crimen: “Hemos visto ataques directos de la delincuencia en contra de la población, ya sea en la calle, en los parques o en sus propios domicilios, ataques contra el sector económico del estado, en contra de los medios de comunicación. Es un escenario lamentable y preocupante”.
Por ello los diputados federales propusieron que los representantes del Congreso de la Unión le demanden a los gobiernos locales citados, aplicar mecanismos válidos y efectivos para combatir la delincuencia y garantizar la seguridad de los habitantes de Jalisco y Zapopan, sobre todo porque esta situación ha comenzado a mermar la tranquilidad y el desarrollo en Jalisco.
“No esperemos a que se lleguen a niveles como los que hemos atestiguado en otras entidades del país, a que el Ejército tome las calles o se susciten enfrentamientos a plena luz del día contra los delincuentes. Es el momento de tomar medidas oportunas, pero sobre todo, legales”, consideró.