Previo a la presentación del libro "Trabajadoras en la sombra. Dimensiones del servicio doméstico latinoamericano", en el Museo Nacional de Culturas Populares en Coyoacán, la también antropóloga aseguró que se trata de un convenio que para el caso mexicano, se regule la situación de dos millones 300 mil personas que trabajan en labores domésticas.
La investigadora recordó que durante la Conferencia General de la Organización Internacional del Trabajo, convocada en Ginebra por el Consejo de Administración de la Oficina Internacional del Trabajo, México fue uno de los países que quedó pendiente en su ratificación y refirió que autoridades mexicanas prometieron hacerlo, lo cual no ha acontecido.
"Es un Convenio en el que se definen distintos derechos, por ejemplo, el que las trabajadoras se afilien a un sindicato y de ahí, cuenten con todos sus derivados como el derecho a la salud, entre otros", dijo.
Comentó que de ratificarse, la Ley Federal del Trabajo y la del Seguro Social tendrían que sufrir modificaciones.
Precisó que en México, dos millones 300 mil personas trabajan en labores domésticas, es decir, cerca del 10 por ciento de la población económicamente activa y se trata del quinto empleo más importante para las mujeres.
La obra editada por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) y el Tec de Monterrey, coordinada por la propia Séverine Durin, María Eugenia de la O y Santiago Bastos, ofrece un panorama sobre la grave situación de las trabajadoras.
Entre ellas, el que las trabajadoras domésticas enfrentan en muchas ocasiones una serie de abusos que van desde la explotación laboral extrema, bajos salarios y humillaciones, hasta el hostigamiento sexual.
"Es un libro que trata sobre el servicio doméstico en el hogar, que es un empleo de gran importancia para las mujeres de México y básicamente una de cada diez trabajadoras se emplean en este sector y es considerable su importancia.
"Lo que demuestra este trabajo es que se articulan diversas desigualdades, es un trabajo fundamental para la producción de la vida, pero no goza del reconocimiento social que se requiere", dijo Séverine Durin.
Destacó que se trata de un sector en donde las mujeres trabajadores no gozan de los derechos que deberían de corresponder.
"Por ejemplo, la Ley Federal de Trabajo reconoce derechos para los trabajadores domésticos pero reduciendo sus derechos en relación a los derechos de los demás trabajadores, son concebidos como trabajadores especiales.
"Tiene consecuencias importantes en términos de discriminación por género, no hay obligatoriedad de la inscripción de las trabajadoras al Seguro Social, entonces no van a gozar por ejemplo de la licencia por embarazo, de la posibilidad de reintegrarse, de despidos injustificados", comentó la investigadora.
"No se trata de un estudio que hace recomendaciones, sino de demostrar cómo funciona; un asunto importante de entender es que el servicio doméstico existe en razón a una enorme desigualdad.
"Cuanto más desigual es una sociedad, más importante será este sector ocupación, es decir, lo que fundamenta su existencia tiene que ver con la igualdad, esto tendrá tasas aceleradas de mujeres en el servicio doméstico en América Latina y otros países", detalló.
Esta obra, producto de una investigación, ofrece además un breve bosquejo sobre la situación de algunos países latinos.