Pironkova jugará por primera vez en cuartos y enfrentará a Serena Williams

La búlgara Tsvetana Pironkova, actual número 472 del mundo, siguió su marcha triunfal en el Abierto de Estados Unidos al ganar este lunes por 6-4, 6-7 (5) y 6-3 a la francesa Alizé Cornet, 56 en la clasificación de la WTA, y se medirá en los cuartos de final con Serena Williams.

El duelo entre dos jugadoras que entraron al cuadro principal sin ser cabezas de serie duró 2 horas y 50 minutos y permitió a Pironkova, verdugo de la española Garbiñe Muguruza en la segunda ronda, alcanzar por primera vez los cuartos de final del Abierto.

La estadounidense Serena Williams, tercera cabeza de serie y quien también ganó este lunes en tres sets, 6-3, 6-7 (6) y 6-3, a la griega María Sakkari, se medirá por quinta vez con Pironkova, con serie perfecta hasta ahora para Williams, pero será el primer duelo entre ambas desde el 2015.

Pironkova, que vuelve a la competición después de haber estado tres años retirada para formar familia, mantuvo un alto nivel de juego y así consiguió su mejor clasificación en el torneo desde que en el 2012 había alcanzado los octavos de final que perdió frente a la serbia Ana Ivanovic.

La búlgara, que había jugado su último partido en Wimbledon del 2017 antes de regresar este año a la actividad, impuso siempre su tenis más completo frente a Cornet, a la que ganó por tercera vez en los cuatro enfrentamientos que han tenido, pero el primero en nueve años.

Pironkova consiguió los tantos decisivos en la primera y la tercera mangas gracias en parte a los errores no forzados de Cornet, de 30 años, que cometió nueve dobles faltas.

Después de estar igualada la tercera manga con perdidas de saque por ambas partes, en el octavo juego Pironkova hizo el quiebre decisivo para con el suyo asegurar el triunfo posteriormente.

Pironkova acabó el partido con 46 golpes ganadores contra 50 errores no forzados, mientras que Cornet acabó con 24 y 34, respectivamente.

Pironkova, una de las nueve tenistas madres que han competido este año en el Abierto, ya se ha convertido en la historia de mayor inspiración dentro del circuito del tenis femenino por la actitud de superación que ha mostrado después de haber estado tres años completos por fuera de la competición.