Aunque a principios de este año el gobierno del presidente Michel Temer había anunciado un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) cercano al tres por ciento, analistas y economistas consultados por el Banco Central prevén ahora que la economía crecerá sólo 1.49 por ciento.
El boletín Focus, publicado semanalmente por la institución monetaria, también estima que los inversores siguen sin confianza para 2019.
La débil actividad económica, con una industria y servicios que están lejos de haberse recuperado por completo de la dura recesión sufrida entre 2014 y 2016, cuando el PIB retrocedió siete por ciento, se suman a las incertidumbres por el escenario electoral.
El próximo miércoles se cierra el plazo para la inscripción de candidaturas para las elecciones de octubre y todavía no está claro si el candidato favorito, Luiz Inacio Lula da Silva, encarcelado por corrupción, podrá participar.
El expresidente de Brasil lidera las encuestas con entre 30 y 40 por ciento de la intención de voto, pero sus problemas con la Justicia podrían inhabilitarlo para los comicios.