La nueva estimación de crecimiento para los cuatro trimestres de 2023 no reflejó un cambio con respecto a la cifra adelantada.
La agencia revisó el dato del ritmo anual de crecimiento en el último trimestre del año indicando que fue del 3.2 %, una décima por debajo del cálculo inicial y lejos del 4.9 % registrado un trimestre antes.
El dato revisado del cuarto trimestre también estuvo por debajo de lo esperado por los analistas.
En la primera de sus dos revisiones de los datos BEA confirmó que el crecimiento económico el año pasado superó las expectativas de los economistas y el incremento del 2.1 % registrado en 2022.
La corrección refleja principalmente una disminución en la inversión privada en inventarios compensada, en parte por revisiones de los gastos de gobiernos estatales y municipales, y del gasto de los consumidores.
El aumento del gasto de los consumidores fue tanto en los servicios como en los bienes. Dentro de los servicios, los principales contribuyentes al aumento fueron los servicios de alimentación y alojamiento, así como la atención sanitaria.
La tasa anual de crecimiento del PIB de Estados unidos ha tenido un promedio del 3.15 % desde 1948 y hasta 2023, y alcanzó una cima del 13.4 % en el cuarto trimestre de 1959, y una sima del 7.5 % en el segundo trimestre de 2020 que refleja el impacto de la pandemia de la Covid-19.
La Reserva Federal (Fed) no bajará las tasas de interés hasta estar segura de que la inflación baja "de manera sostenible" hacia el objetivo del 2 %, según se desprende de las actas de su primera reunión en este año, celebrada a fines de enero.
Las actas de la reunión del 30 y 31 de enero del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal, muestran que el organismo que regula la política monetaria de Estados Unidos considera que las tasas de interés han alcanzado una cima.
"Todos los miembros afirmaron su firme compromiso de devolver la inflación al objetivo del 2 %", apuntan las actas de la reunión en la cual decidió mantener los tipos en la horquilla del 5.25 % y el 5.5 %, su máximo nivel desde 2001.
El comité, sin embargo, dejó abierta la puerta a futuras subidas si las condiciones económicas lo requieren.
El PIB es uno de los datos que analiza de cerca el regulador, junto con la inflación, que en enero fue del 3.1 % después de un 3.4 % en diciembre.