Munguira analizó en Panamá la respuestas globales tras la crisis financiera de 2008, que obligó a los países europeos a revisar las políticas y mecanismos de supervisión de la banca, y adoptar planes de rescate y apalancamiento en el ámbito comunitario.
Sin embargo, señaló que al tratar de reducir la capacidad de la financiación bancaria, ha surgido otro nuevo problema, que es el "régimen bancario en la sombra". Ello equivale al proceso de desintermediación bancaria, que elude los requisitos de solvencia, liquidez y apalancamiento, y privilegia la autonomía bancaria.
El economista comentó que "los bancos quieren escapar del perímetro de supervisión prudencial", lo que podría desencadenar la nueva burbuja del "régimen bancario en la sombra", que representa el 25 por ciento de los activos financieros del mundo y el 115 por ciento del Producto Interno Bruto de los países desarrollados.
Adujo que el Banco Central Europeo dio un "manguerazo selectivo" para romper la dependencia de la deuda pública soberana/entidad bancaria, y empezó a inyectar cantidades masivas de liquidez (1.2 billones de euros, hasta la primavera de 2016, a razón de 60,000 millones de euros mensuales), como pasó en Reino Unido y Japón.
"En Europa hay un procedimiento de unión bancaria, que está fortaleciendo la unión monetaria. Eso significa que las autoridades europeas han reaccionado correctamente, creando los mecanismos únicos de supervisión y las estructuras adecuadas para que en una futura crisis bancaria los mecanismos de resolución funcionen adecuadamente", subrayó.
Pese a ello, el representante de Gobierno Corporativo de la OCDE aseveró en un foro en la capital panameña que se requiere un "ecosistema" entre las políticas de austeridad y las políticas de expansión del crecimiento, y hallar un punto medio entre el fomento de la actividad económica y empresarial y la austeridad. (DPA)