Aumentan desapariciones forzadas en 2017 en contexto de lucha contra terrorismo y migración, alertan expertos de la ONU

La desaparición forzada no debería existir en el siglo XXI, afirman dos expertos independientes de la ONU en un comunicado publicado el 20 de octubre.

Sin embargo, reportes sobre este crimen “atroz” continúan recibiéndose en cantidades inaceptablemente altas, alertaron ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York Suela Janina, presidenta del Comité contra la Desaparición Forzada, y Bernard Duhaime, que preside el Grupo de Trabajo sobre desapariciones forzadas o involuntarias.

Los dos presidentes instaron a la Asamblea General de la ONU en Nueva York a poner la lucha contra las desapariciones forzadas en lo más alto de su agenda, de una vez por todas.

“El Grupo de Trabajo ha presenciado un gran aumento de las llamadas desapariciones a corto plazo en varios países, en particular en el contexto de la lucha contra el terrorismo”, dijo Duhaime.

Janina agregó: “La desaparición forzada es una práctica vergonzosa y un crimen según el derecho internacional de los derechos humanos, ya sea que se use para reprimir la disidencia política, combatir el crimen organizado o llevar a cabo bajo la apariencia de luchar contra el terrorismo”.

“Estas desapariciones se relacionan con la práctica de poner a las personas fuera de la protección de la ley por un período limitado, durante el cual suelen ser interrogados y, a menudo, maltratados o torturados para obtener confesiones o ‘pruebas’ forzadas”, continuó.

Duhaime también destacó el vínculo directo entre la desaparición forzada y la migración, expuesta en un informe del Grupo de Trabajo, un tema que describió como menos visible pero no menos grave.

“Creemos que los gobiernos y la comunidad internacional en su conjunto no están prestando la atención adecuada a este tema”, dijo Duhaime.

“Debido a su naturaleza y su carácter transnacional, los Estados tienden a hacer la vista gorda ante el problema, prefiriendo transferir la culpa a otro lado, ya sea a otro Estado o a un grupo criminal”, agregó.

“La desaparición forzada de migrantes es un problema serio que debe ser reconocido y abordado a nivel mundial”, declararon.

Los expertos también reiteraron su gran preocupación con respecto a la cuestión de las represalias.

“Seguimos observando un patrón de amenazas, intimidación y represalias contra las víctimas de desaparición forzada, incluidos familiares, testigos y defensores de los derechos humanos que trabajan en tales casos”, dijeron los expertos.

Los expertos concluyeron instando a todos los Estados Miembros de la ONU a reconocer las metas y objetivos de la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas.

Se hicieron eco de la reciente petición del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de duplicar el número de ratificaciones en los próximos cinco años. “No existe una excusa válida para que los Estados no ratifiquen la Convención”, agregaron.