Chávez leyó informaciones de prensa según los cuales el "Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) de Colombia desmanteló en Bogotá una fábrica de bolívares y dólares falsos", sin precisar cuándo se llevó a cabo ese operativo.
Las autoridades colombianas se incautaron "casi tres millones de bolívares fuertes" falsos y "1,929,000 dólares falsos", dijo el mandatario, al leer la información de prensa.
"Todo eso viene para acá, esto forma parte de una gran operación de guerra económica contra Venezuela que estamos enfrentando", aseveró el mandatario durante un consejo de ministros nocturno trasmitido parcialmente por la televisión estatal.
El Gobierno adjudica a una "operación de alta factura" en su contra desarrollada por el capitalismo local e internacional los ataques "especulativos" contra el mercado del dólar paralelo o permuta venezolano.
En Venezuela rige desde hace siete años un control de cambios, actualmente con dos tasas, y también existe el dólar paralelo o permuta, al que se accede a través de bonos en dólares emitidos por el Banco Central, cuyo precio ha llegado a casi duplicar el valor oficial más alto, de 4.3 bolívares por divisa.
El alza del dólar permuta ha impactado fuertemente la inflación, que en abril pasado registró 5.2 por ciento, con lo que acumuló 11.3 por ciento en los cuatro primeros meses del año.
El Gobierno anunció el martes pasado la suspensión de las operaciones con los bonos cambiarios, en un intento por frenar el alza de esa divisa paralela.
Ese mercado de bonos en dólares se mantendrá suspendido hasta tanto el Banco Central de Venezuela (BCV-emisor) fije el mecanismo para esas negociaciones, que quedaron completamente bajo su control con la aprobación, la semana pasada, de una reforma a la Ley contra Ilícitos Cambiarios.
Economistas locales ha señalado que la desbandada del dólar permuta es consecuencia de factores macroeconómicos y también de los retrasos en la entrega de dólares por parte de la estatal Comisión de Administración de Divisas (Cadivi).