China actuó "profesionalmente y con moderación" frente a navío filipino

Pekín afirmó hoy que sus guardacostas "operaron profesionalmente y con moderación" cuando un buque filipino entró "sin permiso" en las aguas del arrecife de Ren’ai, sobre el cual China afirma su soberanía, islotes de las Spratly que también reclaman total o parcialmente Brunei, Filipinas, Malasia, Taiwán y Vietnam.

"El arrecife Ren’ai es parte de las islas Nansha de China. El 6 de febrero, un buque de la Guardia Costera de Filipinas irrumpió en las aguas del arrecife sin el permiso de la parte china", declaró hoy el portavoz de Exteriores Wang Wenbin en rueda de prensa.

El vocero de Cancillería también aseguró que siguiendo lo establecido por el derecho nacional e internacional, el navío chino, acusado por Filipinas de emplear un láser cegador contra uno de sus barcos, "mantuvo la soberanía y el orden marítimo de China" y lo llevo a cabo "de manera profesional y con moderación".

"Esperamos que Filipinas respete seriamente la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos de China en el mar de la China Meridional y evite tomar cualquier acción que pueda conducir a la expansión de las disputas y a la complicación de la situación", agregó Wang.

El portavoz también informó que ambos países están conversando sobre este incidente a través de canales diplomáticos, sin llegar a confirmar la veracidad de las acusaciones relacionadas con el dispositivo láser.

Los guardacostas filipinos acusaron a una patrulla costera china por usar un láser cegador, "probablemente de uso militar", contra uno de sus barcos en las aguas del que en Filipinas es conocido como atolón Ayungin -que Filipinas ocupa-, perteneciente a las islas Spratly (llamadas Nansha en China).

Filipinas asegura que este nuevo incidente se produjo a menos de 200 millas (unos 322 kilómetros) de la costa occidental de Palawan, al suroeste del archipiélago y dentro del área económica exclusiva del país.

Esta distancia, 200 millas naúticas, es el límite establecido por la ONU para determinar la soberanía marítima de los Estados, según una convención a la que China se adhirió en 1996.

La denuncia llega en un momento delicado, una semana después de que Filipinas y EE.UU. firmaran un acuerdo que garantiza al país norteamericano el acceso de sus tropas a cuatro nuevas bases militares en áreas "estratégicas" filipinas y que China consideró que “agrava las tensiones en Asia”.

China y Filipinas mantienen un conflicto por la soberanía de varias islas y atolones en el mar de China Meridional, que Pekín reclama casi en su totalidad por "razones históricas", disputándose parte de esos territorios también con Malasia, Vietnam, Taiwán y Brunéi.

Mientras, Estados Unidos busca contrarrestar los movimientos de Pekín en unas aguas clave para el comercio mundial y ricas en recursos naturales, en medio del pulso que ambos países mantienen por aumentar su influencia en el Pacífico.