La Cámara de Comercio de Lugansk informó hoy en su página web que los puestos fronterizos de Dolzhanskyi y Chervonopartyzansk están "cerrados" porque el personal ha sido evacuado. El miércoles, la guardia fronteriza ucraniana había informado en un comunicado que estaba recolocando parte de su personal en la región de Lugansk debido a la "extrema escalada" de la situación, pero no especificó a qué puestos se refería.
El movimiento podría facilitar a los combatientes extranjeros cruzar la fronteriza, que ya en el pasado se consideraba poco asegurada. Se cree que muchos de los activistas que respaldan a los separatistas del este de Ucrania vienen de Rusia y algunos se han identificado abiertamente como tal y se definen como "voluntarios".
La guardia fronteriza ucraniana llevaba más de dos días combatiendo contra los prorrusos, que atacaron su cuartel en Lugansk el lunes, exigiendo la entrega de las armas para luchar "con el pueblo".
En los combates cinco insurgentes murieron y muchos resultados heridos. En otros puntos de la frontera se registraron también enfrentamientos cuando hombres armados intentaron entrar al país. Según la guardia fronteriza, otros tres insurgentes habrían muerto el miércoles en un ataque cuando estaban siendo recolocados.
La insurgencia de la región autoproclamó la República Popular de Lugansk y la República Popular de Donetsk tras controvertidos referendos celebrados en mayo. Ambas pidieron apoyo y reconocimiento a Rusia, pero hasta ahora el Kremlin ha dudado en apoyarlos abiertamente.
Mientras tanto en Donetsk, cientos de miles de personas de cinco ciudades controlados por los prorrusos se quedaron sin suministro de agua, al resultar dañado un conducto, informó la oficina de protección civil ucraniana en Kiev.
Entre las ciudades afectadas se encuentran Slavianks y Kramatorsk, con más de 100,000 habitantes cada una. Miles de personas hacían cola en las estaciones de trenes para comprar un billete y salir de las ciudades.
Rusia denuncia desde hace días la situación humanitaria que afecta a la región y exige la creación de un corredor humanitario para ayudar a los más necesitados. Unas 4,000 personas han solicitado estatus de refugiados a Rusia, informó el jefe de gobierno Dmitri Medvedev. "Es una situación sin precedentes", le citó la agencia de noticias Interfax.
También la situación en Rostov, en la frontera con Ucrania, empeora por momentos. Cada día 3,000 ucranianos intentan salir de allí, pero no todos han solicitado estatus de refugiado a Rusia, dijo Medvedev. Las autoridades fronterizas ucranianas no han confirmado por el momento una ola de refugiados. (DPA)