Los pobres en Italia lo serán por muchos años, señala estudio

El estatuto de pobre de muchas familias italianas de hoy se perpetuará por cinco generaciones, según un estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

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El informe ¿Un elevador social roto? Cómo promover la movilidad social, presenta nuevas evidencias sobre desigualdades de ingresos y oportunidades en las 35 naciones miembros de la OCDE y economías emergentes seleccionadas.

El documento dibuja a una Italia nada alentadora con pocas posibilidades de crecimiento y familias preocupadas por el futuro de sus hijos.

En Italia indica el estudio deberán pasar unos 180 años para que un descendiente de una familia pobre pueda llegar a percibir el ingreso promedio del país.

El 71 por ciento de las familias con desventajas económicas están 'preocupados porque temen que sus hijos no alcancen el mismo estatus que su familia de origen' indicó OCDE y precisó que dos tercios de los niños de hogares con baja instrucción mantendrá ese mismo nivel, y sólo el seis por ciento alcanzará grados superiores.

Asimismo, alrededor del 40 por ciento de los hijos de trabajadores manuales harán igual trabajo al de sus padres y el 31 por ciento recibirá ingresos tan bajos con sus progenitores.

Ello será consecuencia de las 'muy bajas inversiones en la escuela y en la formación', además del poco estímulo, apunta la OCDE y cita como ejemplo la diferencia de los ingresos entre un graduado de nivel medio y superior, la cual es apenas del 40 por ciento, mientras en los países de la OCDE es del 60 por ciento.

En ese índice de ascensor social, Italia está en la media de los países de la OCDE marcada por un tiempo de recuperación social e ingresos por cinco generaciones, que para Francia y Alemania la media será seis años, Brasil y Sudáfrica nueve y Colombia 11 generaciones.

En Dinamarca, Noruega, Finlandia, Suecia y otros países nórdicos será de dos a tres generaciones para superar la desigualdad.

Según la investigación, comentada aquí por medios de prensa, la desigualdad en los ingresos aumentó desde los años noventa, la movilidad social se estancó, lo cual significó que menos personas ubicadas en la parte inferior de la pirámide social han podido ascender.

En cambio los más ricos han mantenido sus grandes fortunas, lo cual genera 'graves consecuencias sociales, económicas y políticas', advierte el texto de OCDE.

Fuente: Prensa Latina