El incidente ocurrió cerca de Yuma, en Arizona, y fue recogido hoy por algunos diarios estadounidenses en los que se especuló que se trató de un arriesgado plan urdido por contrabandistas para introducir drogas o personas sin papeles en Estados Unidos.
Una patrulla fronteriza divisó el vehículo parado sobre la valla en una de sus rondas rutinarias de medianoche y observó cómo dos individuos huían hacia México dejando atrás las evidencias.
Antes de darse a la fuga, los pasajeros del coche, un Jeep Cherokee, habían logrado subir el automóvil hasta lo alto de la verja con ayuda de unas rampas, si bien el todoterreno perdió tracción y se quedó apoyado por su parte central sobre el extremo de la valla y sin poder avanzar.
"Los sospechosos cayeron presa de sus propios dispositivos", según apuntó en un comunicado la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés).
Esa zona es un punto caliente de contrabando, aunque habitualmente las organizaciones criminales optaban por sortear la verja con túneles, algunos de casi un kilómetro de largo, si bien las autoridades estadounidenses han ido mejorando los métodos de detección de estos pasadizos subterráneos.
En 2007, un agente de la patrulla fronteriza falleció en esa área tras ser atropellado por un vehículo cuando se disponía a desplegar en la carretera un dispositivo que causa el pinchazo de los neumáticos.