EE.UU. espera "resultados tangibles" sobre los semiconductores en el encuentro con la UE

Estados Unidos espera "resultados tangibles" del Consejo de Comercio y Tecnología (TTC, en sus siglas en inglés) con la Unión Europea (UE), especialmente en materia del sector de los semiconductores, normas tecnológicas y la seguridad de la cadena de suministro.

Así lo aseguraron este lunes en una llamada con periodistas sobre la reunión de este miércoles en Pittsburgh (Pensilvania, EE.UU.) varios altos funcionarios de la Administración estadounidense, que prefirieron no revelar su nombre.

En concreto, Estados Unidos aseguró que existe "un fuerte deseo" entre ambos socios de encontrar soluciones conjuntas para evitar interrupciones en la cadena de suministro de semiconductores, que ha provocado problemas en varios sectores, como el de la automoción.

"Tanto EE.UU. como la UE planean realizar inversiones importantes en sus regiones para fortalecer la fabricación de semiconductores y alcanzaremos compromisos", dijo uno de los altos funcionarios.

En este encuentro comercial se reunirán el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken; la secretaria de Comercio, Gina Raimondo, y la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, con los vicepresidentes ejecutivos de la Comisión Europea (CE), Margrethe Vestager y Valdis Dombrovskis.

EE.UU. explicó en esta llamada con periodistas que estas reuniones con su aliado europeo beneficiarán a la clase media estadounidense "sobre la base de valores democráticos compartidos y una amplia relación económica" con la UE.

"Estados Unidos y la UE continuarán trabajando juntos para garantizar que las políticas comerciales y tecnológicas se promulguen para nuestros pueblos", agregaron los altos funcionarios.

El TTC fue una de las conclusiones a las que llegaron la UE y EE.UU. durante su cumbre bilateral de junio en Bruselas, oficializado por el presidente estadounidense, Joe Biden, y la de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen.

Está previsto que la negociación en el seno del TTC la aborden diez grupos de trabajo centrados en cooperación en materia de normas tecnológicas, los retos del comercio mundial y la seguridad de la cadena de suministro, el clima y la tecnología verde.

También la seguridad y la competitividad de las tecnologías de la información y la comunicación, la gobernanza de los datos o las plataformas tecnológicas.

La reunión llega en un momento tenso para las relaciones transatlánticas, después de la retirada caótica de Afganistán que muchos europeos consideran que Estados Unidos manejó mal y la ira europea por la venta de submarinos de Estados Unidos a Australia.

Ese acuerdo estadounidense supuso la cancelación de un contrato de Francia valorado en aproximadamente 65.000 millones de dólares, lo que sentó mal en París.

Por otro lado, en Washington se considera que la Unión Europea no gasta lo suficiente en consumo o defensa, lo que genera desequilibrios económicos.