Exnegociadores urgen a México a evitar pasividad ante revisión del T-MEC

México debe asumir una postura activa y propositiva ante la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en 2026, coincidieron en entrevista con EFE los exnegociadores comerciales Luis de la Calle y Kenneth Smith.

Ambos expertos advirtieron de que el país no puede limitarse a reaccionar a las demandas de Washington de forma pasiva, tras la guerra arancelaria iniciada desde el retorno de Donald Trump a la presidencia de EE.UU. y las críticas al tratado firmado por los tres países de Norteamérica en 2019.

En entrevistas por separado, De la Calle y Smith señalaron que, si bien el tratado contempla una revisión programada para julio de 2026, las consultas internas en EE.UU. comenzarán en octubre de 2025, lo que obliga a México a prepararse desde ahora con una agenda clara y ambiciosa.

“Hay que estar preparados para contrarrestar eso (las demandas de Trump) desde una postura defensiva, pero también ver qué temas ofensivos a favor de la facilitación comercial, de la innovación y de los intereses de los exportadores e inversionistas mexicanos se pueden insertar”, dijo Kenneth Smith, exjefe negociador técnico de México del T-MEC.

Por su parte, Luis de la Calle, quien participó en la negociación de la versión anterior del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en la década de 1990, coincidió en que el país debe enfocarse en fortalecer su plataforma interna.

“La pregunta no es si estamos listos para negociar con EE.UU., sino si estamos preparados para hacer la tarea en México. No se ve aún esa voluntad, ni del gobierno ni del sector privado”, afirmó.

 Ambos coincidieron en que el ‘Plan México’, impulsado por la presidenta, Claudia Sheinbaum, puede convertirse en una herramienta clave si logra concretarse en políticas públicas eficaces.

El plan prevé elevar la inversión total al 30 % del producto interno bruto (PIB) mexicano hacia 2030, aunque la mayor parte deberá provenir del sector privado, pues el gobierno solo estima un 2 % de inversión pública.

“¿Tenemos las condiciones hoy en día para generar niveles de inversión de 28% del PIB privados? La respuesta es no”, sostuvo de la Calle.

Smith coincidió en que el plan depende de condiciones internas: “La clave va a ser la capacidad del gobierno de establecer reglas claras en energía, electricidad, gas, petróleo, etcétera”.

Diversificación internacional

En el plano internacional, los expertos alertaron sobre la necesidad de que México diversifique sus relaciones comerciales para reducir su dependencia de EE.UU.

“Hay que concluir la modernización del tratado con la Unión Europea, cerrar el acuerdo con Reino Unido y aprovechar el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TIPAT) para enviar señales de apertura”, apuntó De la Calle.

Sobre una eventual ruptura del tratado trilateral y su reemplazo por acuerdos bilaterales, consideraron que no es deseable.

“Yo creo que sería un gravísimo error romper esta liga, esta interconexión que existe en los procesos productivos en Norteamérica”, dijo Smith.

También sugirieron que México podría aprovechar la revisión para incluir temas clave como semiconductores, inteligencia artificial y manufactura avanzada.

En caso de que Estados Unidos imponga nuevos aranceles bajo argumentos de seguridad nacional, como ya ha ocurrido con productos como el acero y aluminio, Smith sugirió que México recurra a los mecanismos de solución de controversias del T-MEC.

Ambos concluyeron que México tiene una ventana de oportunidad para asumir el liderazgo en la región si actúa con visión estratégica.

“Si mandas la señal de que tienes una voluntad de estar abierto, de tener altas disciplinas, de tener una relación con Asia y con Europa al mismo tiempo con Estados Unidos, eso fortalece tu independencia”, concluyó De la Calle.