La fuga de capitales alcanzó en Rusia los 5,000 millones de dólares en mayo frente a los 7,800 millones en abril, informó Lídiya Tróshina, jefa de balances del Banco Central de Rusia.
"La fuga ha disminuido", afirmó Tróshina, quien precisó que en general no fueron los bancos sino las empresas las que sacaron sus capitales al extranjero.
De ahí la fuga de capitales totalizó en Rusia los 35,000 millones de dólares en los cinco primeros meses del año, informa la agencia Interfax.
"Es un proceso bastante extraño", declaró el gobernador del Banco Central de Rusia, Serguéi Ignátiev.
Con anterioridad Ignátiev ya se había mostrado preocupado por la magnitud de la fuga de capitales al término del primer cuatrimestre.
"Es una cifra muy alta", dijo entonces Ignátiev, quien señaló varias posibles causas del fenómeno, entre estas el temor de una caída de los precios del petróleo.
Con todo, "la causa principal de la fuga de capitales de Rusia es el poco atractivo clima de inversiones", admitió el jefe de la entidad emisora.
Con los índices actuales no hay manera de esperar resultados positivos de captación de capitales en este año, agregó.
La fuga de capitales batió los récords en 2009 con 60,000 millones de dólares y el año pasado fue de 35,000 millones de dólares.