Kishida coloca la natalidad en el centro de sus políticas sociales de 2023

El primer ministro japonés, Fumio Kishida, se comprometió este lunes a centrar sus políticas sociales en apoyar la crianza de los hijos, con el objetivo de revertir la rápida caída de la natalidad que amenaza la funcionalidad de Japón.

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Foto de archivo del primer ministro japonés, Fumio Kishida. EFE/EPA/ETTORE FERRARI

En su discurso de la jornada inaugural de la sesión parlamentaria ordinaria de 2023, Kishida dijo hoy que el archipiélago se encuentra "en un momento límite" para el mantenimiento de su sostenibilidad y señaló las políticas sobre natalidad como "un tema prioritario".

"Éste es un asunto que no podemos dejar para más adelante", dijo el jefe del Ejecutivo nipón, que aseguró en su alocución que la ayuda para la crianza "es una inversión eficaz para el futuro" y prometió "construir una economía y una sociedad que priorice a los niños" para revertir la caída en picado de la natalidad en el país.

Japón registró en 2021 un mínimo histórico de 811.604 nacimientos y, a la espera de la publicación de los datos oficiales, se estima que la cifra cayó por debajo de los 800,000 en 2022.

Para abordar esta tendencia, que unida al rápido envejecimiento de la población (en torno a un 30 % de la población del país supera los 65 años) plantea una encrucijada demográfica para el país, Kishida busca aumentar las normativas y subvenciones para la crianza.

Japón tiene previsto inaugurar en abril la Agencia de los Niños y Familias, un organismo gubernamental destinado a supervisar las políticas infantiles del país, de gestión muy descentralizada.

Coincidiendo con la instauración de esta agencia, el primer ministro japonés se ha comprometido a compilar para junio un serie de medidas y propuestas que buscan duplicar el presupuesto relacionado con la crianza de los hijos, y ha encargado al ministro a cargo de las cuestiones de natalidad que trabaje en ello.

El Gobierno ha adelantado ya una ayuda para cubrir los altos costes de los partos en el país y Kishida reveló hoy que buscan además introducir un sistema de becas educativas.

"Tendremos que coordinar la acción social con el papel del Gobierno central y los locales para que sea un sistema estable" con el objetivo de "crear una sociedad que pueda tener hijos sin preocupación", dijo el primer ministro japonés.