Catador de whisky y eremita por la pandemia

Anosmia y ageusia son dos palabras que atormentan a Blair Bowman. Este joven escocés, que trabaja como catador de whisky, vive recluido en su hogar en Edimburgo desde que estalló la pandemia por el miedo a sufrir cualquiera de esos dos síntomas asociados a la covid: la pérdida del olfato y del gusto.