La decisión del alto representante internacional en Bosnia, Valentin Inzko, de prohibir la negación del genocidio y crímenes de guerra, está alimentando nuevamente las divisiones étnicas en el país, advirtieron hoy analistas locales.
La decisión del alto representante internacional en Bosnia, Valentin Inzko, de prohibir la negación del genocidio y crímenes de guerra, está alimentando nuevamente las divisiones étnicas en el país, advirtieron hoy analistas locales.