Unos bosques en buen estado podrían llegar a absorber hasta el 30 % del CO2 acumulado en la atmósfera (unas 226 gigatoneladas, Gt), siempre y cuando se lleven a cabo de manera paralela los esfuerzos de reducción de emisiones comprometidos por los países y el sector privado.
Unos bosques bien conservados podrían retirar el 30 % del CO2 acumulado en la atmósfera
